l lo tiene claro, no necesita más que un saxo para poder expresarse y lo hace a través de la improvisación libre y el jazz. Miembro y fundador de bandas como Cruz Perro Maldito o Sal Om Free…

El lo tiene claro, no necesita más que un saxo para poder expresarse y lo hace a través de la improvisación libre y el jazz. Miembro y fundador de bandas como Cruz Perro Maldito o Sal Om Free… Ricardo Marichal es de esos personajes que forman parte de la escena y la historia de la improvisación libre y el jazz en Canarias.

¿Cómo entra el saxo en tu vida?

De vez en cuando me asalta esta pregunta. La música siempre me ha fascinado, posiblemente porque de niño veía a mi padre emocionado tocando el laúd o el violín.

En mi época de estudiante recuerdo que intentaba vestirme diferente, dejarme el pelo largo, y escuchar música, cuanto más rara mejor. A partir de ahí comencé a investigar sobre la música, comprar vinilos, compartirlos, leer biografías de músicos, libros de bachiller de música clásica a la par que escuchaba su música, enciclopedias de jazz, y sobretodo preguntando a los que sabían.

Recuerdo cuando me compré mi primer cassette mono, lo adoraba, las primeras cintas que me compré fue “Animals” de Pink Floyd, y “Studio Tan” de Frank Zappa, y me aprendía la música de memoria. Tenía el habito, si me gustaba un músico, de escuchar toda su discografía, como el caso de King Crimson, Gong, Yes, Soft Machine, etc. A principios de los 80, ya había escuchado la clásica contemporánea, Free Jazz y empezaba a deleitarme en la música del sello alemán ECM.

Con este caldo de cultivo, un amigo me dijo que había un profesor argentino que se llamaba Bebe Martin que daba clases de saxofón, en ese momento estaba flipado con Keith Jarrett, y quería apuntarme en clases de piano, pero al final me resultó más cómodo estudiar saxofón junto con mi amigo Juan Pedro.

¿Jazz, Impro libre? o ¿Impro libre, Jazz?

Me encanta llevarle la contraria a todo el mundo, nadar contra corriente, y en cuanto a la música, no quería que me contaminara el jazz americano.

Como decía Frank Zappa: “El jazz no ha muerto, pero huele raro”.

Siempre he sabido que música quiero hacer, y lo que necesito escuchar o aprender para que me contamine.

Aprendo de toda la música, en especial me gusta el Rock Progresivo, la Clásica Contemporánea, el Free Jazz y la Improvisación libre.

Me gustaría que me contaras tu manera de escuchar y sentir esta música.

La música te debe de contar una historia que te atrape, que te deleite, que te haga sentir, viajar, llorar, emocionarte, entrar en trance. No es ritmo, no es melodía, no es armonía, no es tu tía, es algo más que todo esto. Es muy difícil describirla, como decía Lacan al nombrarla matábamos la cosa.

Hay muchas formas de entender la música:

Frank Zappa decía que hacía una música para la gente alucinara sin tener que colocarse.

Jimi Hendrix: “Quiero hacer música tan perfecta que se filtre a través del cuerpo y sea capaz de curar cualquier enfermedad”

Jan Garbarek: Su objetivo era endulzar la vanguardia para que llegase a más personas.

Al principio, cuando escuchaba un disco, me centraba en cada instrumento individualmente en cada escucha, luego los combinaba de dos en dos. Y al final todo en su conjunto, recordando en cascada cada sensación sentida con anterioridad.

El mayor enemigo de un músico es el ego y la envidia. Nunca lo he entendido. Siempre hago lo posible por ayudar a la gente que está empezando. Siempre habrá alguien mejor y alguien peor.

Los mejores músicos que he conocido sólo tocan para sí mismos. No se atreven a tocar delante de nadie.

¿has tenido relación o conexión con otras disciplinas artísticas que te hayan influenciado?.

Mi vida ha estado muy unida a la Cultura. En 1985 aprobé unas oposiciones y entré a trabajar en la Consejería de Cultura y Deportes. Como Jefe de Negociado de Coordinación Cultural, conocí a músicos, escritores, actores de teatro, pintores, cineastas. Muchos de ellos con un gran reconocimiento mundial.

¿Hay algún tipo de concepto o filosófía detrás, que te inspire a crear o interpretar tu música de alguna manera determinada?.

Mi mayor influencia viene a través de la música del sello alemán ECM, fundado por el alemán Manfred Eicher, contrabajista de improvisación libre, e ingeniero de sonido del prestigioso Deutsche Grammophon.

Creo que la cultura es lo más importante en nuestras vidas. Una persona culta no viola, no mata, respeta a sus semejantes hasta la médula, aunque en todo hay excepciones.

Has colaborado con muchos músicos y supongo que tocaban desde lo más analógico hasta lo más digital, y diferentes tipos de agrupaciones… ¿con qué tipo de intrumentos y formaciones te sientes más cómodo tocando?,¿ por qué? , y al contrario, ¿con que tipo de instrumentos y formaciones te sientes menos cómodo tocando?, y ¿ por qué? .

Me siento muy cómodo en cualquier tipo de formación, siempre que participe con mi saxofón tenor. No me gusta nada tocar solo, es muy desagradable no compartir el momento improvisado con alguien. Es como hablar solo por media hora.

En improvisación libre prefiero los dúos y los tríos, ya que tienes que poner mucho más de tu parte. Y si hay un instrumento armónico mejor, pero una formación que tengo en mente y me gustaría experimentar sería con dos saxofones tenores y un batería. En cuanto a los instrumentos analógicos o digitales. Creo que es interesante hacer música electrónica con instrumentos analógicos.

Sal Om Free y Cruz Perro Maldito.

Sal Om Free es mi proyecto personal, creado en 1995, es como una residencia donde entran y salen músicos, con música exclusivamente de creación propia, en las tendencias del actual jazz europeo y música clásica contemporánea. En el siguiente link está toda la información: música, críticas, prensa, videos.

salomfree.wordpress.com

Cruz Perro Maldito.- En su día me llamó el mánager Alejo González, del sello discográfico Discos Delejos, y me dijo: Ricardo quiero grabarte, tu me dices si quieres grabar sólo, o con un dúo, grupo, lo que tu quieras.

En ese momento le dije, tengo ganas de hacer un grupo al estilo de Fire!, con mucha caña, energía pura, con música totalmente improvisada. Y en ese momento le contesté, -he pensado en un trío con David Paredes y en Carlos Pérez-.

Estamos en una época donde el músico es el último mono. Ganan los técnicos, la prensa, los organizadores, los gestores, y en último lugar está el músico, el compositor. Pensando en todo esto, me dije: Si no ensayo rentabilizo más mi tiempo.

En todos los años que llevas haciendo impro, ¿crees que ha habido alguna evolución en las islas?. ¿Avanzamos?, ¿retrocedemos?, ¿désde o hacia donde?, no solo a nivel espacios, conciertos, actividades, sino de la percepción del público sobre la impro y la experimentación.

Desde los años 60 hasta la actualidad ha coexistido todas las formas de manifestación musical, donde podemos encontrar verdaderas obras maestras de la improvisación, y esto es lo importante. Que estén o no localizadas aquí y ahora es lo menos relevante, y ajeno a nuestra voluntad.

Y hablando de público, ¿crees que es importante formarlos, o introducir la impro libre en los conservatorios y escuelas de música?.


Un grupo de personas que toman decisiones ipso facto, que no necesitan jefes ni instrucciones, que trabajan en equipo, que van en la misma dirección, que se potencian unos a otros, que son sus propios vigilantes y sus propios verdugos, buscando su eficiencia en lo que hacen. Son exactamente las cualidades que potenciaría un sistema para que la sociedad se manipule a si misma, en beneficio de los cuatro que gobiernan el mundo.

La sociedad post pandemia, según Byung Chul Han, se encamina peligrosamente hacia un régimen de vigilancia biopolítica.

El cuerpo de los ciudadanos, sus comunicaciones y hasta su estado de salud se están convirtiendo en objetos de vigilancia digital. Y muchos ciudadanos justifican y hasta aplauden esos sistemas de vigilancia que limitan la libertad individual, por miedo a nuevos contagios.

Está claro que la pandemia ha sido una sacudida para todo el mundo, pero al margen de ella, ¿que crees que haría falta para darle un empujón a la experimentación, impro y vanguardias en general en las islas?.


Por experiencia, puedo decir, que el descubrimiento de la impro libre ha supuesto el evento más importante en mi vida. Y no podemos ser egoístas. Tenemos que compartirlo con todo el mundo. Su práctica va a multiplicar tu conocimiento y efectividad a la hora de tocar cualquier estilo de música.

Aprovecho para informar a todos los músicos o no músicos, que el último domingo de cada mes de 17:00 a 21:00 horas, en un local llamado El 4Densayo, situado en la c/ El Hurón, N.º 12, en Geneto – San Cristóbal de La Laguna, organizamos sesiones de impro libre llamadas: “Tríos Díscolos”. Se colocan todos los nombres de los músicos que deseen participar en una urna, con algunas papeletas en blanco y se extraen 3 cada vez, los cuales tocarán de 5 a 10 minutos como máximo, hasta que participen todos. En el caso de que salgan los tres en blanco. Nos sentaríamos durante unos minutos a escuchar el dulce silencio.

La última pregunta suele ser la autopregunta free, la no pregunta, o un momento para soltar lo que quieras, y en tu caso toma más sentido aún.

Gracias por invitarme a esta entrevista, espero que algún día improvisemos juntos, aunque tenga que cruzar el charco.

Por último, felicitarte y agradecerte tu trabajo y tiempo dedicado a la promoción de la Cultura. Gracias.